dilluns, 8 de desembre del 2008

Novelda al XIX: vista per Pascual Madoz


Així era Novelda segons el navarrès Pascual Madoz als voltants del 1850. Un document realment molt interessant que ens dóna moltes pistes de la situació de Novelda a les entrades de la Restauració i, sobretot, d'un període de créixement important en l'àmbit econòmic i social:

Novelda: villa con ayuntamiento, cabeza del partido judicial de su nombre en la província de Alicante (4 leguas), audiencia territorial y capitanía general de Valencia (22 leg.), diócesis de Orihuela (6 leguas).
Situación y clima. Situada en terreno llano, á la derecha de una rambla llamda de Vinalapó, la baten todos los vientos, y principalmente los del E. Su clima es templado y saludable.

Interior y afueras de la población. Se compone de 1.013 casas, la mayor parte de 3 pisos con habitaciones cómodas para las familias y colocación de frutos; son de piedra y yeso, y se distribuyen en 22 calles generalmente bien formadas, una plaza llamada de la Constitución de figura cuadrangular y de mediana extensión, en la que se hallan la casa del ayuntamiento, la del marqués de la Romana, parte de la iglesia, una posada, cárcel y varias casas de buen aspecto, la cual sirve de mercado semanal, y 3 plazuelas denominadas de San Vicente, de la Cruz y de los Santos Médicos, que no tienen destino alguno. La casa del ayuntamiento es de 3 pisos; forma el primero la lonja, el segundo la sala de acuerdos, una antesala y un cuarto para secretaría y archivo; y el tercero tiene 2 habitaciones cómodas que sirven de cárcel, una para mujeres y otra para distinguidos; la prisión común del partido está junto á este edificio, la cual no es segura ni tiene la ventilación necesaria. Hay escuela de niños dotada con 3.000 reales; otra de niñas con 2.160; hospital para pobres enfermos socorrido por la caridad pública; una iglesia parroquial de término con una portada de muy buena arquitectura, está dedicada á San Pedro Apostol, y la sirve un cura, 2 vicarios, 19 placistas numerales que forman clero, y 10 beneficiarios de sangre; el cura y el vicario primero son de provisión real ó del ordinario, segun el mes de la vacante; la vicaria segunda, de patronato del señor marqués de la Romana; los placistas, de nombramiento del diocesano, y los beneficiados, de presentación particular y aprobación del ordinario. Tiene 2 ayudas de parroquia; la una titulada de San roque al estremo de la población, y la otra de San pedro apostol en el caserío de la Romana, servida cada una de ellas por un vicario de patronato del señor marqués de aquel título, y 3 ermitas con culto público dedicadas a San Felipe Neri, Sto. Cristo del Monto Calvario en el cementerio estramuros, y Sta. Maria Magdalena en el Castillo de la Mola. Está este situado en la sierra del mismo nombre á la margen derecha del rio Vinalapó, dista una hora al N. de la población: se titula tambien el castillo de Luna, por creerse haber estado preso en él D. Álvaro de Luna, cuya tradición parece no tener fundamento. Se halla destruido en su mayor parte, aunque se convervan por su mucha solidez 2 torreones de muy buena arquitectura, estando mencionado en el título, que D. Juan I de Aragón y Doña Violante dieron al pueblo de Novelda a D. Pedro Maza de Lizana, ascendiente del actual marqués de la Romana, en 1º de mayo de 1.393. Como no hay fuentes en la población la mayor parte de los vecinos se surten del agua de una acequia de riego de mala calidad que pasa por medio de la villa; pero los dueños de casas acomodadas la traen para su consumo de Aspe, Monforte, ó de la fuente de la Reina que nace en el monte de la Mola, que no es perene.

Termino. Confina por N. con los de Monovar, Elda y Petrel; E. Agost; S. Monforte y Aspe, y O. Con el último y otra vez Monovar; su extensión es de 1 legua de N. a S., y 2 de E. A O. En su radio se encuentran los caserios de Algayad, Las Cuevas, que se compone de 7 casa y 35 cuevas á la falda de la sierra Gorda, el de la Romana, cuya descripción hacemos en su artículo, y más de 300 casas esparramadas por todo él, habitadas por los dueños y cultivadores de los campos.

Terreno. Es llano generalmente, y solo una vigésima parte está ocupado por montes que siguen formando cordillera; algunos, como son entre ellos la sierra de Beties, y la de Algayad, que cria buenos pastos en lo inculto, si bien en sus laderas tiene grandes plantíos de almendros y viñedos. La parte llana es medianamente fértil, muy escasa de aguas pluviales y de buenos abonos; la rambla de Vinalapó atraviesa por el término, perdiendose debajo de las arenas, y volviendo luego á aparecer en la presa que hay en el de Monforte; trae regularmente poca agua, y aunque es ancho su cauce, destruye muchas veces los campos contiguos á sus riberas en sus furiosas avenidas.

Caminos y correos. Pasa por el pueblo la carretera de Murcia y Orihuela para Valencia, que se encuentra en mal estado; hay un pontazgo lamado de Monforte, aunque está en el término de Novelda, y dista ¼ de legua de uno a otro pueblo; es un edificio nuevo y de bastante capacidad, y a su inmediación se encuentra una posada de dominio particular. El correo lo recibe tres veces a la semana de cada una de las carreras generales.

Producciones. Los granos, higos, almendras, anis y algarrobas se cosechan en bastante cantidad; el vino se computa anualmente por un quinquenio en 200.000 cántaros, y hay además toda clase de frutas y algunas legumbres y verduras; mantiene ganada lanar en úmero de unas 3.000 cabezas, y el de labor suficiente para el cultivo.

Industria y comercio. La agrícola, 8 fábricas de aguardiente, 9 molinos harineros y 12 de aceite. El comercio se hace con los frutos y productos del país; hay un mercado semanal en el que se vende todo género de comestibles.

Población. 1.802 vecinos, 8.095 almas. Capital productivo. 7.364.700 reales. Imponible 602.536. Contribución. 141.642. El presupuesto municipal asciende a 39.000 reales, que arbitrios, impuestos sobre puestos públicos para la venta de comestibles, y el déficit por reparto vecinal. Es Novelda población antigua. En 1.305 permitió el Rey de Aragón a los caballeros de Novelda, que se hallaban en la defensa de Elche, que saliesen libremente.